Post by Abdiel on Feb 27, 2008 14:17:54 GMT -5
A Satán y su rebelión se le hace referencia como una bestia con diez coronas y siete cabezas. Una descripción similar aparece en Daniel.
Apoc 13:1 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.
Dan 7:7 Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos.
Podemos fácilmente deducir que una corona pertenece a ‘un rey’ y hay diez reyes unidos en una alianza con Satanás como su líder.
El hombre con los ojos de fuego aparece en Apocalipsis pero en Daniel estos ojos son descritos como ‘antorchas de fuego’. Su forma física es ilustrada más adelante como teniendo cabello blanco y/o uñas (o pies) de bronce mientras en Apocalipsis el tiene pies como bronce bruñido. Más aún, el es asemejado, como siendo el hijo del hombre (i.e. mortal). Es claro que estamos hablando del mismo individuo.
Apoc 1:14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego;
Dan 10:6 Su cuerpo era como de berilo, y su rostro parecía un relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos y sus pies como de color de bronce bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.
Daniel También describe una persona que tiene una opinión muy elevada de su posición dentro de la creación. Se hace llamar ‘El Altísimo Anciano De Días’. El Cristianismo, en general, trabaja conjeturando que el Hijo de Dios tiene que ser ‘El Altísimo’ y cree que este es no más que otro título para Él. No lo es. La prueba se haya en El Código En Apocalipsis.
En referencia al Anciano De Días (ADD):
Dan 7:10 Un río de fuego corría, saliendo de delante de El. Miles de millares le servían, y miríadas de miríadas estaban en pie delante de él. El tribunal se sentó, y se abrieron los libros.
Haciendo referencia a Jesús:
Apoc 5:11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y de los seres vivientes y de los ancianos; y el número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares,
Nota del T: Aquí vemos una versión que no es la Reina Valera. Esta versión (BJ76, Biblia de Jerusalén 1976) es una de las que encontré que traducían correctamente esta reversión. Las versiones de la Reina Valera no lo hacen así en el versículo de Apocalipsis. La Biblia de Las Américas (LBLA), también hace un correcto trabajo de traducción.
Una miríada son 10,000 unidades de acuerdo con una de sus acepciones; miles es lo mismo que millares, así que ahora podemos hacer cuentas:
El ADD = (1,000’s × 1,000’s) + (10,000 × 10,000)
El Hijo = (10,000 × 10,000) + (1,000’s × 1,000's)
Podemos ver que al evaluar la ecuación, llegaríamos al mismo número, la única diferencia, y es una gran diferencia, ¡es que los números están al revés! El Apóstol Juan hizo esto en Apocalipsis con precisión deliberada.
La reversión nos permite extrapolar lo obvio:
El Anciano De Días es opuesto al Hijo
El Anciano De Días esta en contra del Hijo
El Anciano De Días es Anti El Hijo
El Anciano De Días es el Anticristo - El Altísimo Anticristo
La totalidad de los números se refiere a lo largo y lo ancho del universo como reino. El Hijo y El Anciano De Días están reclamando la soberanía del mismo universo. No hace falta una gran cantidad de imaginación para proponer que el Anciano De Días es un usurpador con intenciones de destronar al Hijo de Dios. Un ejemplo de reversión sería una anomalía, sin embargo, esta es una herramienta que Juan empleó repetidamente y establece una ‘metodología’.
Estos dos versículos son no más que el principio de la verdadera revelación y proveen los límites que definen La -Guerra en el Cielo y anulan cualquier duda de que Jesús y el Anciano De Días sean personas diferentes.
Jesús una vez enseño que una casa dividida no se sostiene. Él conocía bien esta lección. Uno no tiene que ser un estudioso de la Biblia para proponer que el Hijo no estaría inclinado a trabajar en contra de Sus propios interéses. No obstante, la reversión claramente demuestra dos individuos separados en oposición el uno del otro.
Adicionalmente, mientras que Satanás, es sin duda, un ser infame, ejemplar del mal, hay uno que es peor que él, El Dragón, El Anciano De Días.
Vamos a tomar un momento para reunir algunos puntos de referencia. Los interruptores temporales que ocurren en el Libro de Apocalipsis nos dan un a pista de que el tiempo posiblemente no es lo que pensamos que es. El Apóstol Juan se sentó en su mesa dos mil años atrás dando saltos temporales en su mente entre el presente, el pasado y el futuro.
Es de interés que la mayoría del material en la obra de Daniel esta centrado en la guerra del Anciano De Días contra el Hijo mientras en Apocalipsis sólo hay unas cuantas líneas. En Daniel, El Anciano De Días declara su victoria. En Apocalipsis, El Hijo De Dios anuncia su triunfo. ¿A quien entonces le creemos?
La respuesta esta en saber quien tiene una perspectiva más elevada de la premisa con respecto al asunto del tiempo. Quien puede ‘ver’ más allá en el futuro y quien poseería el panorama correcto.
El Padre le otorgó al Hijo los enormes poderes necesarios para administrar un universo completo y la discreción para utilizar tales otorgamientos, como considere propio y digno. El Hijo es el Alfa y la Omega, El Principio y El Fin de Su línea de tiempo.
Tenemos evidencia de suficientes limitaciones presentes para deducir que el Anciano De Días tiene factores cualitativos que el Hijo no tiene y que el Hijo es más grande; no más pequeño o menos que. Una cosa sí es segura, que durante Su vida en la Tierra como Jesús, El Hijo sabía lo que sucedía y le paso parte de esa información a los Apóstoles. Esto le sirve también de aviso al hombre de los ojos de fuego y a las siete iglesias. Donde concierne a asuntos temporales, no existe ninguna evidencia que remotamente sugiera que El Anciano De Días pueda sostenerse más elevado contra el Hijo. Los puntos de vista que difieren proveen el contraste entre una creencia y una realidad.
Si vemos el Libro de Daniel como una Declaración de Rebelión del Anciano De Días contra el Hijo de Dios, entonces, Apocalipsis se convierte en la contraparte a tal proposición. El lector debe tener en cuenta los ejemplos de oposición y pugna entre los dos libros.
La declaración del Anciano De Días como ‘El Altísimo’ es un indicador secundario de conflicto con el Hijo. Es cierto que el Anciano De Días es un individuo posicionado en un lugar muy alto y que el es responsable por las operaciones de día a día del gobierno del universo. Esto deja al Hijo como el líder espiritual. No obstante, existe una cadena de mando presente la cual establece claramente al Hijo como el ‘poder’ más alto.
Apoc 13:1 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.
Dan 7:7 Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos.
Podemos fácilmente deducir que una corona pertenece a ‘un rey’ y hay diez reyes unidos en una alianza con Satanás como su líder.
El hombre con los ojos de fuego aparece en Apocalipsis pero en Daniel estos ojos son descritos como ‘antorchas de fuego’. Su forma física es ilustrada más adelante como teniendo cabello blanco y/o uñas (o pies) de bronce mientras en Apocalipsis el tiene pies como bronce bruñido. Más aún, el es asemejado, como siendo el hijo del hombre (i.e. mortal). Es claro que estamos hablando del mismo individuo.
Apoc 1:14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego;
Dan 10:6 Su cuerpo era como de berilo, y su rostro parecía un relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos y sus pies como de color de bronce bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.
Daniel También describe una persona que tiene una opinión muy elevada de su posición dentro de la creación. Se hace llamar ‘El Altísimo Anciano De Días’. El Cristianismo, en general, trabaja conjeturando que el Hijo de Dios tiene que ser ‘El Altísimo’ y cree que este es no más que otro título para Él. No lo es. La prueba se haya en El Código En Apocalipsis.
En referencia al Anciano De Días (ADD):
Dan 7:10 Un río de fuego corría, saliendo de delante de El. Miles de millares le servían, y miríadas de miríadas estaban en pie delante de él. El tribunal se sentó, y se abrieron los libros.
Haciendo referencia a Jesús:
Apoc 5:11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y de los seres vivientes y de los ancianos; y el número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares,
Nota del T: Aquí vemos una versión que no es la Reina Valera. Esta versión (BJ76, Biblia de Jerusalén 1976) es una de las que encontré que traducían correctamente esta reversión. Las versiones de la Reina Valera no lo hacen así en el versículo de Apocalipsis. La Biblia de Las Américas (LBLA), también hace un correcto trabajo de traducción.
Una miríada son 10,000 unidades de acuerdo con una de sus acepciones; miles es lo mismo que millares, así que ahora podemos hacer cuentas:
El ADD = (1,000’s × 1,000’s) + (10,000 × 10,000)
El Hijo = (10,000 × 10,000) + (1,000’s × 1,000's)
Podemos ver que al evaluar la ecuación, llegaríamos al mismo número, la única diferencia, y es una gran diferencia, ¡es que los números están al revés! El Apóstol Juan hizo esto en Apocalipsis con precisión deliberada.
La reversión nos permite extrapolar lo obvio:
El Anciano De Días es opuesto al Hijo
El Anciano De Días esta en contra del Hijo
El Anciano De Días es Anti El Hijo
El Anciano De Días es el Anticristo - El Altísimo Anticristo
La totalidad de los números se refiere a lo largo y lo ancho del universo como reino. El Hijo y El Anciano De Días están reclamando la soberanía del mismo universo. No hace falta una gran cantidad de imaginación para proponer que el Anciano De Días es un usurpador con intenciones de destronar al Hijo de Dios. Un ejemplo de reversión sería una anomalía, sin embargo, esta es una herramienta que Juan empleó repetidamente y establece una ‘metodología’.
Estos dos versículos son no más que el principio de la verdadera revelación y proveen los límites que definen La -Guerra en el Cielo y anulan cualquier duda de que Jesús y el Anciano De Días sean personas diferentes.
Jesús una vez enseño que una casa dividida no se sostiene. Él conocía bien esta lección. Uno no tiene que ser un estudioso de la Biblia para proponer que el Hijo no estaría inclinado a trabajar en contra de Sus propios interéses. No obstante, la reversión claramente demuestra dos individuos separados en oposición el uno del otro.
Adicionalmente, mientras que Satanás, es sin duda, un ser infame, ejemplar del mal, hay uno que es peor que él, El Dragón, El Anciano De Días.
Vamos a tomar un momento para reunir algunos puntos de referencia. Los interruptores temporales que ocurren en el Libro de Apocalipsis nos dan un a pista de que el tiempo posiblemente no es lo que pensamos que es. El Apóstol Juan se sentó en su mesa dos mil años atrás dando saltos temporales en su mente entre el presente, el pasado y el futuro.
Es de interés que la mayoría del material en la obra de Daniel esta centrado en la guerra del Anciano De Días contra el Hijo mientras en Apocalipsis sólo hay unas cuantas líneas. En Daniel, El Anciano De Días declara su victoria. En Apocalipsis, El Hijo De Dios anuncia su triunfo. ¿A quien entonces le creemos?
La respuesta esta en saber quien tiene una perspectiva más elevada de la premisa con respecto al asunto del tiempo. Quien puede ‘ver’ más allá en el futuro y quien poseería el panorama correcto.
El Padre le otorgó al Hijo los enormes poderes necesarios para administrar un universo completo y la discreción para utilizar tales otorgamientos, como considere propio y digno. El Hijo es el Alfa y la Omega, El Principio y El Fin de Su línea de tiempo.
Tenemos evidencia de suficientes limitaciones presentes para deducir que el Anciano De Días tiene factores cualitativos que el Hijo no tiene y que el Hijo es más grande; no más pequeño o menos que. Una cosa sí es segura, que durante Su vida en la Tierra como Jesús, El Hijo sabía lo que sucedía y le paso parte de esa información a los Apóstoles. Esto le sirve también de aviso al hombre de los ojos de fuego y a las siete iglesias. Donde concierne a asuntos temporales, no existe ninguna evidencia que remotamente sugiera que El Anciano De Días pueda sostenerse más elevado contra el Hijo. Los puntos de vista que difieren proveen el contraste entre una creencia y una realidad.
Si vemos el Libro de Daniel como una Declaración de Rebelión del Anciano De Días contra el Hijo de Dios, entonces, Apocalipsis se convierte en la contraparte a tal proposición. El lector debe tener en cuenta los ejemplos de oposición y pugna entre los dos libros.
La declaración del Anciano De Días como ‘El Altísimo’ es un indicador secundario de conflicto con el Hijo. Es cierto que el Anciano De Días es un individuo posicionado en un lugar muy alto y que el es responsable por las operaciones de día a día del gobierno del universo. Esto deja al Hijo como el líder espiritual. No obstante, existe una cadena de mando presente la cual establece claramente al Hijo como el ‘poder’ más alto.